El valor de las previsiones

Ya se trate del clima, los votos o los precios de las acciones, los pronósticos de los llamados expertos generalmente no son más útiles ni confiables que el simple lanzamiento de una moneda.

Y, sin embargo, nada es más fácil que convertirse en un verdadero gurú de los mercados financieros. Sólo hace falta una predicción precisa para convertirse en un verdadero héroe... y hacernos olvidar las otras 99 predicciones erróneas que nunca se hicieron realidad. Aquellos que predijeron correctamente una caída del mercado de valores generalmente predijeron docenas de otras... pero en mal momento.

Desde el inicio del mercado alcista en marzo de 2009, cientos de estrategas y otros analistas sobrepagados han anunciado la inminente llegada del próximo mercado bajista. También aquí uno entre todos estos charlatanes acabará teniendo razón y será ensalzado como un verdadero genio. Escribirá un libro en el que explicará detalladamente cómo, mientras tomaba su café, había adivinado que un accidente era inminente al observar el repentino desdén de su gato por su marca favorita de croquetas.

Incluso un reloj roto da la hora correcta dos veces al día. Incluso un analista incapaz acabará acertando algún día... ¡siempre que haga al menos una previsión al día!

A veces, el precio de una acción se dispara exactamente como acaba de anunciar un famoso inversor. Pero no es que haya anticipado este movimiento, es sólo que tantos inversores en ciernes lo imitaron ciegamente y compraron estas mismas acciones en masa, ¡que mecánicamente hicieron que subieran! Estamos hablando aquí de profecía autocumplida.

No creo en profecías, adivinos y otros Nostradamus baratos.

Los pronósticos simples, de bajo riesgo y de sentido común son los más sólidos: Los productos que vende Nestlé se seguirán consumiendo dentro de 50 años. ¿Ocurre lo mismo con Tesla, Facebook y Netflix?

Para tener éxito en la bolsa, no debes dejarte influenciar por todos estos pájaros de mal agüero, saber mantener tu independencia de espíritu y tener la honestidad de admitir que muy a menudo... no sabes nada. Mantente humilde y con los pies en la tierra, no creas que eres un genio. Diversifique su cartera, compre calidad, no pague de más y, sobre todo, no intente encontrar el próximo Microsoft.

Las previsiones del mercado de valores también dependen en gran medida de el horizonte temporal: Los altibajos a corto plazo del mercado de valores son mucho más aleatorios que su evolución a largo plazo, porque esta última depende de las tendencias económicas básicas y de los crecientes beneficios de las empresas a largo plazo, y no de los cambios diarios de humor. de especuladores.

Para convencerse de la inutilidad o incluso de la ridiculez de las predicciones, nada más instructivo que repasar algunas de ellas que se han hecho famosas:

Hace más de un siglo, Guillermo II (último emperador de Alemania de 1888 a 1918) afirmó: "Ich glaube an das Pferd. Das Automobil ist eine vorübergehende Erscheinung" (el automóvil es sólo un efecto de la moda, el caballo es el futuro) .

"El mercado de valores ha alcanzado lo que parece ser un altiplano permanente", dijo Irving Fisher, profesor de economía en la Universidad de Yale, el 17 de octubre de 1929... apenas unas semanas antes de la mayor caída del mercado de valores de la historia.

“Créanme, Alemania es financieramente incapaz de afrontar una guerra”, explicó David Lloyd George (ex primer ministro británico) en 1934.

“Para la mayoría de la población el consumo de tabaco tiene efectos beneficiosos”, sermoneó el Dr. Ian McDonald, famoso cirujano de Los Ángeles, en 1963.

Pero las mejores predicciones probablemente provienen del mundo de la tecnología y la informática: “640 kb deberían ser suficientes para todos” (Bill Gates en 1981). "Internet es sólo una exageración" (del mismo autor, en 1993). O también: “No hay ninguna posibilidad de que el iPhone consiga una cuota de mercado significativa” (Steve Ballmer, 2007).

Y usted, por cierto, ¿cree que el Dow Jones cerrará a cuánto la semana que viene? 😉