Libérate de la carrera de ratas: cómo escapar de las cadenas del consumo y alcanzar la independencia financiera

Leí el mito de la Caverna de Platón cuando era adolescente y, aunque no lo sabía en ese momento, esta historia cambió para siempre mi visión de la vida. Recomiendo ampliamente a cualquiera que aún no lo haya leído que lo haga. Imagínese una cueva con prisioneros encadenados a una pared durante toda su vida. No pueden moverse ni girar la cabeza. Se entretienen mirando las sombras en la pared frente a ellos. Estas sombras son creadas por titiriteros colocados frente a un fuego justo detrás de la pared donde están atados los prisioneros. Estos últimos toman estas sombras como realidad y las cadenas forman parte de su entorno de vida. Pero un día, uno de los prisioneros es liberado. El fuego lo ciega temporalmente y no comprende la conexión entre los títeres y las sombras en la pared. Más tarde, incluso sale de la cueva y queda cegado por el sol. Le lleva un tiempo comprender la realidad del mundo y acaba compadeciéndose de los prisioneros que aún están encadenados en la cueva.

Una vez estuve encadenado a estos muros, en un círculo vicioso de trabajar, ganar, gastar y consumir. Pensé que era la única manera de vivir, porque eso es lo que todos hacían. Las sombras proyectadas en las paredes (anuncios de autos nuevos, fotos de vacaciones caras) me mostraron el camino, y no tenía motivos para dudar de que estaba mal. Todos a mi alrededor también estaban encadenados a estas paredes, observando las mismas sombras, trabajando para ganar dinero y luego gastarlo. Estas cadenas de deuda y consumo innecesario son extremadamente difíciles de romper.

Fui liberado de estas cadenas a mediados de 2010. Empecé a buscar otra manera de vivir y encontré Tu dinero o tu vida, un libro que habla de tu vida en términos de tiempo y energía, no de dinero. Cuando trabajas por un salario, comercias unidades de energía vital por dinero. Por supuesto, esta energía vital está limitada en el tiempo. ¿Cuánto de este tiempo limitado equivale a la hipoteca de una casa grande, un coche nuevo, un guardarropa nuevo? ¿Cuántas de estas cadenas quieres colocar en tus muñecas? Decidí que no quería ninguna cadena y salí de la cueva. Al principio estaba ciego, pero ahora mis ojos se han adaptado.

Mi tiempo aquí en la Tierra es limitado y cada minuto que pasa es una unidad menos de energía vital que me queda. No quiero perder 50% o más de ese tiempo disponible en una oficina tratando de ascender en una escalera corporativa que no lleva a ninguna parte. Si prestas atención a las sombras (anuncios de consumo), en lugar de a los titiriteros (empresas de marketing de productos), nunca podrás escapar de estas cadenas. No digo que nunca debas gastar dinero, sino simplemente pensar en tu consumo. Tener una casa de cinco dormitorios cuando no tienes hijos, tres coches cuando sólo hay dos personas usándolos o mantener el termostato en alto en invierno son estilos de vida que podrían y deberían modificarse.

Ahora que ya no estoy atado a estos canales, soy consciente de todos mis gastos. Reduje gastos de teléfono e internet, vendí mi auto y tomo el autobús, alquilando un apartamento barato que está en la línea de autobús que me lleva al trabajo. Invierto mis ahorros en empresas que fabrican productos que la gente usa todos los días. Piense en bebidas, alimentos, gasolina, medicinas, pasta de dientes, etc. ¡Incluso las personas frugales necesitan cepillarse los dientes! Estas empresas recompensan a los inversores con distribuciones periódicas, en forma de dividendos, y con estas distribuciones espero algún día poder pagar 100% de mis gastos.

¿Qué opinas? ¿Estás atado por tus propias cadenas? ¿Saliste de la cueva?